La respiración, más allá de ser un acto instintivo, ha sido moldeada por culturas antiguas y filosofías centenarias. En este episodio vamos a hablar de cómo civilizaciones a lo largo de la historia han comprendido y honrado este elemento vital, descubriendo conexiones profundas entre la respiración, la espiritualidad y la diversidad cultural.
Desde las antiguas tradiciones orientales que consideraban la respiración como un puente hacia la serenidad y la autoconciencia, hasta las prácticas occidentales que exploran sus beneficios físicos y psicológicos, hoy te invito a contemplar la universalidad de la respiración a través de los siglos.
¡Prepárate para un viaje en el tiempo que te inspirará a respirar más profundamente y a apreciar la riqueza de cada respiración! Y como siempre terminamos compartiendo una meditación para equilibrar los elementos, ¡no te la pierdas!
Contenido:
- Enfoque histórico de la respiración: minuto 08:49
- Orígenes en los vedas
- Upanishads
- Los Yoga Sutras de Patanjali
- Hatha Yoga Pradipika
- Evolución en la Era Moderna
- Fusión con la Ciencia Moderna
- Meditación: equilibrio de tattvas más allá del estrés y la dualidad: minuto 22:20
Transcripción
La respiración es un acto cotidiano pero extraordinario. Puede producirse de manera involuntaria, pero también consciente. Esto es algo único en el cuerpo humano, ya que no podemos controlar voluntariamente ningún otro proceso fisiológico, y hace de la respiración una herramienta magnífica para transformar nuestra mente y energía.
A lo largo de la historia ha habido personas realmente fascinadas por entender la respiración, como si cada inhalación y exhalación tuviera un potencial oculto esperando ser descubierto.
Desde antiguas civilizaciones hasta mentes curiosas de épocas más recientes, esta búsqueda se ha mantenido, siempre guiada por la misma pregunta: ¿Qué pasa cuando realmente entendemos y aprovechamos todo el poder de nuestra respiración?
En este episodio vamos a recorrer el pasado, para sumergirnos en las diferentes concepciones de la respiración, explorando cómo sus descubrimientos siguen influyendo en la forma en que entendemos y honramos este acto vital.
Orígenes en los Vedas
Comenzamos en el punto de origen del Yoga, que es la época védica, en torno al año 1500 a.C. La espiritualidad en esta cultura está asociada a rituales y no a las prácticas físicas o meditativas que conocemos y seguimos a día de hoy.
Los Vedas son textos sagrados de la India antigua, están compuestos en sánscrito y cada uno de ellos contiene himnos, cánticos y fórmulas rituales que están destinados principalmente a ser recitados o cantados durante ceremonias y ritos religiosos.
El carácter ritual de los Vedas es fundamental para comprender su propósito y función. Los rituales védicos eran actos de adoración que involucraban ofrendas simbólicas, cánticos específicos y procedimientos muy precisos.
Los Vedas prescriben rituales para honrar a diversos dioses y diosas, así como para armonizar al individuo con las fuerzas cósmicas y naturales. Aquí, como en todas las culturas de la antigüedad, la espiritualidad estaba asociada a la naturaleza y al universo.
Por ejemplo, algunos himnos del Rigveda están destinados a invocar la benevolencia de deidades como Agni (el dios del fuego), Indra (el dios del trueno y la lluvia) y Surya (el dios del sol).
La importancia de estos rituales radica en su papel central para mantener el orden cósmico y establecer una conexión armoniosa entre los humanos, los dioses y la naturaleza. Estos rituales eran llevados a cabo por sacerdotes especializados, conocidos como brahmanes, siguiendo las instrucciones precisas de los Vedas.
Éstos no proporcionan instrucciones detalladas sobre prácticas específicas de pranayama tal como las conocemos en la actualidad. Sin embargo, sí contienen indicaciones sobre la importancia de la respiración en el contexto de la espiritualidad y las prácticas meditativas.
Los Vedas mencionan el término «prana» en varias ocasiones, que como ya sabes se refiere a la energía o fuerza vital que impulsa la existencia. Aunque no detallan pranayamas específicos, reconocen la relación entre la respiración consciente y el flujo de esta energía vital.
Las prácticas de pranayama en el sentido más estructurado y codificado se desarrollaron más tarde.
Upanishads
Avanzamos ahora hasta la época de los Upanishads, entre los años 800 y 500 a.C.
Los Upanishads, que son posteriores en la literatura védica, se centran en aspectos filosóficos y espirituales, incluyendo una exploración más profunda de la conexión entre la respiración y la conciencia.
Siguen sin ofrecer instrucciones detalladas sobre prácticas de respiración específicas, pero sí profundizan en la comprensión de la importancia de la respiración en el contexto de la vida y la espiritualidad.
Uno de los Upanishads más importantes en este sentido es el Prashna Upanishad, que aborda preguntas fundamentales sobre la existencia y la realidad. En este texto, se hace referencia a la respiración como un símbolo de la conexión entre el individuo y el universo, sugiriendo que la inhalación representa la absorción de energía cósmica, mientras que la exhalación simboliza la liberación de impurezas y tensiones. Así, la respiración se convierte en un proceso vital que refleja la naturaleza cíclica de la creación y la disolución.
El Mandukya Upanishad, otro texto importante, explora el significado de la sílaba «Om» y su relación con la conciencia. A través de la contemplación y el análisis profundo, este Upanishad sugiere que la respiración está conectada con el estado de vigilia, el sueño y el sueño sin sueños, representando los diferentes aspectos de la realidad. Esto puedes comprenderlo mejor con un vídeo que tengo en el canal de YouTube sobre el significado del mantra Om, te lo dejo enlazado.
Aunque los Upanishads no detallan técnicas específicas de pranayama, establecen la base filosófica para comprender la importancia de la respiración en la búsqueda espiritual. Estos textos sugieren que la respiración no es simplemente un proceso fisiológico, sino un puente hacia la comprensión más profunda de la realidad y la unidad con lo divino.
Los Yoga Sutras de Patanjali
Continuamos avanzando para hablar de una figura fundamental dentro del Yoga, que es Patanjali. Famoso por escribir los Yoga Sutras, en realidad es un personaje bastante misterioso sobre el que no hay ningún tipo de consenso ni certeza. De hecho no se conoce la fecha exacta de creación de los Yoga Sutras, sólo se estima que pudo ser entre el siglo II a.C. y el siglo IV d.C.
Los Yoga Sutras son una colección de aforismos que proporcionan una guía filosófica y práctica (por primera vez) para el yoga, y han sido una influencia fundamental en la filosofía y práctica del yoga a lo largo de la historia. Incluso hoy son la base de todas las formaciones y enseñanzas, todo el Yoga actual está basado en ellos.
Su valor reside en que por primera vez se sistematizó el conocimiento del Yoga, creando un método, ya que hasta entonces era un conjunto de prácticas de lo más variadas, sin ningún tipo de orden ni estructura.
Y para nosotros hay otro valor añadido, y es que por primera vez se habla de pranayama, una disciplina que va más allá de la simple respiración para convertirse en una guía práctica para la transformación interior.
Patanjali lo establece como uno de los 8 pasos a seguir siendo los primeros los aspectos éticos, yamas y niyamas, el tercero la práctica de asanas, el cuarto el control de la respiración o pranayama, el quinto el control de los sentidos o pratyahara, y el resto los estados meditativos de dharana, dhyana y samadhi.
En estos sutras, Patanjali nos ofrece una hoja de ruta detallada sobre cómo emplear conscientemente la respiración para equilibrar la mente y alcanzar estados de conciencia más elevados.
Nos enseña técnicas específicas de Pranayama, desde la respiración lenta y profunda hasta la retención consciente, cada una diseñada para afectar positivamente la mente y el cuerpo. Y nos brinda además la comprensión de que no son simplemente ejercicios físicos; sino puertas hacia una mayor autocomprensión y conexión espiritual.
Patanjali nos revela el poder de la respiración como un medio para aquietar las fluctuaciones de la mente, llevándonos más allá de las distracciones superficiales hacia un estado de concentración profunda.
Nos guía a través de la práctica consciente de la inhalación y la exhalación para purificar no sólo el cuerpo, sino también los pensamientos y emociones que residen en la mente.
Como te digo son técnicas y enseñanzas que siguen vigentes a día de hoy, y establecen la base tanto teórica como práctica para el desarrollo espiritual.
Hatha Yoga Pradipika
Desde aquí saltamos al siglo XV con la publicación de otro de los textos más importantes dentro del Yoga que es el Hatha Yoga Pradipika.
Este texto, considerado uno de los primeros en abordar profundamente las técnicas de pranayama, nos guía hacia el corazón mismo de la respiración consciente y sus impactos en la práctica del yoga.
En el Hatha Yoga Pradipika, encontramos un manual detallado que despeja completamente el camino hacia la comprensión más profunda de la respiración.
Y es muy interesante porque siguiendo el esquema de Patanjali comienza mostrando los diferentes asanas, y después pasa al pranayama diciendo que una vez que estás establecido en las posturas, puedes empezar a practicar pranayama. Esta es la idea que retoma posteriormente Iyengar, aunque como sabes no es del todo aceptada a día de hoy.
Este libro nos habla de forma directa y detallada de la relación entre el prana y la mente, y cómo la respiración sirve para acallarla. Y también pone especial énfasis en cómo emplear la respiración para la purificación de los canales energéticos, hablando de las nadis, los vayus y los gunas.
Nos introduce nuevas técnicas de pranayama, como la respiración alterna, o nadi sodhana, kapalabhati, ujjayi, sheetkari, shitali, maha bandha, etc. Como ves, todo lo que practicamos actualmente.
Estas técnicas no sólo buscan mejorar la salud física, sino que también se centran en preparar la mente y el cuerpo para la meditación profunda y nos invitan a explorar la conexión íntima entre la respiración y los estados de conciencia, revelando cómo la respiración consciente puede ser la llave para desbloquear nuestro potencial interno y experimentar la paz y quietud que anhelamos.
Evolución en la Era Moderna
Ahora llegamos al siglo XX, una época que presenció el renacimiento global del yoga, transformándolo de una práctica ancestral a una disciplina mundialmente conocida y celebrada.
En este período crucial, destacados maestros de yoga se convirtieron en los protagonistas y arquitectos de esta revolución, llevando consigo no sólo las posturas físicas, sino también las sutilezas de la respiración. Ya hemos nombrado a alguno de ellos en el episodio anterior, al hablar de la respiración en los diferentes estilos de Yoga, pero vamos aún así a revisarlo.
B.K.S. Iyengar, conocido por su enfoque en la alineación y la precisión en las posturas, integró la respiración de manera intrínseca en su metodología.
Para él, la respiración no era simplemente un acto fisiológico, sino un vínculo dinámico entre la mente y el cuerpo, por lo que en sus enseñanzas, la respiración consciente se convirtió en un puente para explorar la conexión más profunda con el ser interior, transformando las posturas en experiencias holísticas de bienestar.
Eso sí, primero había que perfeccionar la postura, y después dotarla de mayor profundidad al incluir la concentración en la respiración.
Pattabhi Jois, por otro lado, introdujo el estilo Vinyasa, que se caracteriza por incluir secuencias fluidas de movimientos coordinados con la respiración.
Él en concreto creó el Ashtanga Yoga, que se convirtió en una corriente poderosa que se dio a conocer rápidamente en todo el mundo.
La creación de los estilos dinámicos no sólo añadió una dimensión atlética y vigorosa al yoga, sino que también destacó la importancia de la respiración consciente para guiar y sincronizar cada movimiento, convirtiendo la práctica en una meditación.
Paramahansa Yogananda, famoso por su libro «Autobiografía de un Yogui», pone su énfasis en la meditación yóguica, introduciendo técnicas específicas de respiración rítmica.
En su obra compartió cómo la respiración consciente podía ser una llave para calmar la mente y prepararla para la exploración de estados meditativos más profundos.
Estos maestros aportan diferentes enfoques sobre la respiración, pero todos ellos contribuyeron a la difusión global del yoga. Sus enseñanzas se convirtieron en puentes culturales, uniendo prácticas milenarias con la mentalidad contemporánea.
En la actualidad podemos ver su herencia en la diversidad de estilos de yoga, cada uno con su énfasis único en la respiración como piedra angular para la transformación interna.
A lo largo de la historia cada inhalación y exhalación se ha convertido en un testimonio vivo de la síntesis entre la tradición y la innovación, guiando a innumerables practicantes hacia la armonía física, mental y espiritual.
Fusión con la Ciencia Moderna
Ahora, para terminar, vamos a hablar del fascinante cruce entre el yoga contemporáneo y la ciencia moderna, donde el antiguo arte de la respiración consciente se encuentra con los nuevos hallazgos científicos.
Y es que en la actualidad podemos observar un creciente interés en comprender la ciencia detrás de las técnicas de respiración utilizadas en el yoga, y lo emocionante es que la investigación científica respalda de manera contundente los beneficios que los yoguis han experimentado y transmitido a lo largo de los siglos.
Numerosas investigaciones han demostrado que las prácticas de respiración utilizadas en el yoga no sólo impactan positivamente en la salud física, sino que también influyen significativamente en el bienestar mental.
Cuando inhalamos y exhalamos conscientemente, activamos el sistema nervioso parasimpático, conocido como la «respuesta de relajación». Esta respuesta contrarresta el estrés crónico y promueve la calma y la claridad mental. La ciencia respalda la idea de que la respiración profunda y consciente puede reducir la presión arterial, disminuir los niveles de cortisol (la hormona del estrés) y mejorar la función cognitiva.
Además, se ha demostrado que las técnicas de respiración específicas, como la respiración diafragmática y la respiración nasal alterna, tienen efectos positivos en la salud cardiovascular, la función pulmonar y la regulación emocional.
La sincronización de la respiración con el movimiento, una característica clave en muchos estilos de yoga, también ha demostrado mejorar la concentración y la coordinación.
Explorar la intersección entre la ciencia y el yoga contemporáneo nos permite apreciar aún más cómo estas prácticas ancestrales han sido avaladas por la evidencia científica. Y para muchos de los que buscan enriquecer su práctica de respiración, comprender cómo la ciencia respalda los beneficios físicos y mentales puede ser un motivador adicional para comprometerse con estas técnicas.
Así que la respiración consciente no sólo ha resistido la prueba del tiempo, sino que también ha encontrado una resonancia profunda en los laboratorios y estudios científicos modernos.
Meditación: equilibrio de tattvas más allá del estrés y la dualidad
- Para abrir el espacio: siéntate con la espalda recta, coloca las manos en el mudra de plegaria y canta 3 veces Ong Namo Guru Dev Namo.
- Postura: sentado con la espalda recta en postura Fácil (Sukhasana), doblas los codos hacia los lados, manteniendo los antebrazos paralelos al suelo, y las manos frente al corazón. Vas a juntas las yemas de los dedos con bastante presión, de forma que se mantenga pegado el primer segmento de cada dedo. El resto queda separado, así como las palmas. Todos los dedos apuntan hacia delante, excepto los pulgares que quedan enfocados hacia dentro.
- Respiración:
- Inhalación: respiración completa lentamente por la nariz.
- Exhalación: fraccionada en 8 partes iguales por la boca, redondeando los labios. Con cada golpe de exhalación contraes suavemente el ombligo (salvo si estás embarazada o menstruando).
- Ojos: enfocados en la punta de la nariz.
- Tiempo: 3 minutos.
- Para terminar: inhala profundo, sostén el aire dentro aplicando mula band durante 10 segundos y después exhala. Inhala una vez más y sacude las manos, después relaja.
- Para cerrar el espacio: recita el Eterno Sol “que el Eterno Sol te ilumine, el amor te rodee y la luz pura interior, guíe tu camino” y canta 3 veces Sat Nam.